Como en todas las historias siempre existió una figura, en este caso llamado Siddhartha Gautama, el cual ha sido conocido en la historia como Buda. La vida y las enseñanzas del Buda histórico son un mito en el entendimiento humano, pero el propio Buda fue un hombre común que no pretendía origen divino. La creencia en un dios creador no tiene parte en el budismo.
El príncipe Siddhartha Gautama nació alrededor del 560 a. de C en una pequeña aldea justo debajo del Himalaya. Su padre era el rey del clan Sakya. En la noche de la concepción su madre la Reina Maya soñó que un elefante blanco había entrado en su sueño. El sueño revelo que el niño era especial. Poco después de haber nacido un santo hombre predijo que podría llegar a ser un líder del mundo.
Un día su padre decidió no dejarlo salir del palacio nunca más pues quería que fuera su sucesor, quería convertirlo en rey, mientras el príncipe crecía su padre lo educaba en artes tradicionales y ciencias como también en deportes de lucha, cosas que no lo llenaban, cosas que hacía por su padre. Al darse cuenta, el rey decidió volverlo adicto al palacio pues tenía una cámara secreta de amor, decorada con arte erótico, la cual lleno de mujeres para satisfacer sus necesidades como hombre. Sin darse cuenta el Rey había cometido un error, pues las mujeres le contaban al príncipe sobre lo hermoso que era el mundo exterior; sin pensarlo dos veces el príncipe decidió hacer un viaje.
En el momento en que empezó su camino se dio cuenta que el mundo a su alrededor sufría, el no entendía porque, pues no conocía mas de lo que había vivido en el palacio, decidió no volver jamás y empezar su propio camino en búsqueda de tranquilidad, sin excesos, sin sufrimientos, después de entender que era un pobre, un anciano y un enfermo decidió irse de su pueblo en búsqueda de mas, estaba sorprendido del sufrimiento que estaba viviendo el mundo en el que vivía. Le pregunto a varios maestros pero ninguno supo responderle el porqué del sufrimiento, entonces fue allí donde el decidió ir a buscar esa respuesta.
Empezó su solitario viaje en búsqueda de una “tribu” en la que se sintiera tranquilo, en la que no viera sufrimiento, pero se dio cuenta que eso era lo único que la gente vivía, desilusionado se sentó en el tronco de un árbol (el cual paso a ser símbolo sagrado en el budismo) a meditar acerca de su camino, decidió no pararse hasta no encontrar una solución, así le causara su muerte.
Después de un largo tiempo sentado allí, paso por un rio un santo hombre en una barca tocando guitarra y fue allí cuando Siddhartha se ilumino, se dio cuenta que la vida debía ser como las cuerdas de una guitarra: no muy apretadas pues se revientan, no muy flojas porque no suena bien, tiene un punto céntrico en donde la guitarra se convierte en melodía, en donde la vida se convierte en tranquilidad. Cuando abrió los ojos se dio cuenta que su mirada había cambiado que todo lo veía diferente, que despertó de una pesadilla en la que vivía, decidió llamar a ese gran momento iluminación, despertar: Buddi (de allí vienen el resto de sus diferentes interpretaciones).
Gracias a ese momento Buda pudo responder la pregunta que más lo atormentaba: ¿ porque sufrimos?, “sufrimos porque deseamos” , “sufrimos porque no tenemos lo que queremos, queremos mas, queremos menos, no estamos satisfechos con lo que la vida nos regala”.
Al encontrar su respuesta decidió emprender su segundo camino: enseñarle al mundo su descubrimiento. Su compasión y paciencia fueron legendarias y tuvo miles de seguidores.
Murió en el 483 a. de C a los 80 años, enfermo pero feliz y en paz.
El budismo
En el siglo XXI, el budismo se ha convertido en la religión cada vez más importante para los americanos desde la Tierra del Fuego hasta Alaska. Hoy en día, mucha gente leen libros acerca del budismo, y la meditación budista, incluso están empleando estas ideas budistas en el trabajo y con sus relaciones. Si usted es uno de ésos que está muy interesado en el dharma, algún día, usted puede decidir a hacer un discípulo de nuestro Buda y vivir el camino de entender, fe y amor. La meta de este sitio de web es para ayudarle a familiarizarse con el proceso de ser un budista Shin.
Sepa los Fundamentales
Si usted quisiera que el budismo sea su religión, hay algunas cosas para considerar. Primero, usted debe ser familiarizado con las enseñazas básicas del budismo tales como el karma, el renacimiento, las Nobles Cuatro Verdades, el Noble Camino Octuple, los Diez Preceptos, el nembutsu, la Tierra Pura, y Amida Buddha. No es necesario aceptar todos estos conceptos en el principio, pero uno debe estar dispuesto a considerarlos. El Buda nunca pidió que sus discípulos creyeran algo porque se lo dijo. Él nos dijo que uno necesita probársela a sí mismo primero.
Comprensión Es Importante
Con el budismo, el entender es la cosa más importante y ésto necesita tomar tiempo. No se apure para ser budista. Tome su tiempo, haga preguntas, considere el dharma cuidadosamente, y después tome su decisión. El Buda no estaba interesado en tener una gran cantidad de discípulos. Él se preocupó más que sus discípulos estaban siguiendo las enseñanzas como resultado de una investigación cuidadosa y de la experiencia personal.
¿Cómo Puede Ser Budista?
Participe en un sangha budista (un templo, una iglesia o un grupo), apóyelo, sea apoyado por él y continúe aprendiendo más sobre las enseñanzas de nuestro Buda. Lea sobre las enseñanzas, apliqúelas en su vida, asista a las reuniones y los retiros, abre su corazón y mente a la gran compasión del nembutsu-Namu-Amida-Butsu. Al final, cuando usted está listo, usted puede dedicarse formalmente al camino budista a través de la Ceremonia de la Afirmación Shin.
Afirmación Budista Shin
La decisión para convertirse en budista Shin es marcada por la Ceremonia de la Afirmación. Primero, la Ceremonia de la Afirmación o el Kikyoshiki es algo que pertenece solamente al budismo Shin. Es una forma de confirmación religiosa personal, en la cual el participante reconoce públicamente su dedicación al camino de la Tierra Pura de Shinran Shonin. Asimismo en término religioso, es un reconocimiento de la presencia de la Gran Compasión (Amida) en su vida. Como se declaró anteriormente, esta ceremonia pertenece sólo al budismo Shin, que es un movimiento religioso laico y no es una orden religiosa. Esta ceremonia no exige la transmisión de las Tres Joyas ni los Cinco o Diez Preceptos desde un maestro (monje) al discípulo. La Asemblea de la Fe Budista y su Asociación Budista Shin de las Américas (ABSA) siguen la inspiración de nuestro fundador Shinran Shonin, en el cual todos somos los maestros a otro. Por lo tanto, según el budismo Shin, la transmisión verdadera puede venir sólo de una experiencia religiosa directa y personal, que se llama shinjin, de la dimensión infinita, simbolizado como Buda Amida. Además, el budismo Shin no ha puesto formalmente los Preceptos laicos, que se pueden recibir a través de la transmisión humana; en su lugar, con el shinjin, como la experiencia de despertar, el motivo para practicarlos manifiesta naturalmente.
La Ceremonia de la Afirmación permite que el participante reconozca públicamente su experiencia personal de fe al nuestro Buda Amida, el Dharma (las enseñanzas y verdad) y el Sangha (los que practican el dharma y se confían a la vida y a la luz infinitas). Además, esta ceremonia contiene la recitación pública de la Afirmación Budista Shin que sirve como un recuerdo de nuestra fe y práctica diaria.
Afirmación Budista Shin
Confiando en el Voto Primal de Buda,
Recitando su Nombre Sagrado,
Viviré la vida con fuerza y alegría.
Viviendo en la luz de Buda,
Reflejando sobre mi infinitud,
Viviré la vida con gratitud.
Siguiendo las enseñanzas de Buda,
Escuchando el camino sano,
Compartiré el Dharma con todos.
Alegrándome en la compasión del Buda,
Respetando y ayudando a todos los seres,
Trabajaré para el bienestar de la sociedad y del mundo.
Además, la Ceremonia de la Afirmación puede confirmar los Diez Preceptos como las mejores maneras de vivir en nuestro mundo sufridor. Una vez más, ésta no es una transmisión de un código ético sino apenas un recuerdo de su importancia en el camino budista. Además, nuestra Ceremonia de la Afirmación incluye la recitación de los Votos de Bodhisattva como la base de nuestra inspiración y propósito. Véase abajo para aprender más sobre los Votos de Bodhisattva.
En esta ceremonia, la AFB les otorga a los recipientes un nombre budista (homyo), un certificado y a Okesa budista Shin. Generalmente le dan una donación pequeña para cubrir los gastos de la ceremonia.
¿Qué Quiere Decir “Tomar refugio?”
Tomar refugio significa aceptar las Tres Joyas como abrigos de estabilidad, verdad y paz en un mundo inseguro, ignorante y sufridor. El recipiente acepta las Tres Joyas como la manera esencial para superar el sufrimiento y para realizar la Tierra Pura y de este modo, conduce a todos los seres al nirvana. Tomar refugio significa la confianza total en los valores espirituales más importantes de la vida.
Tomar refugio no es sólo una aprobación intelectual para las enseñanzas budistas sino que es una reorientación y una espiritualización total de la vida del discípulo. Resulta que reorganiza totalmente el modo de ser para realizar el dharma en su vida, o sea, el discípulo se encarna totalmente al Buda, del Dharma y del Sangha.
¿Cuáles Son Las Tres Joyas?
Tomar refugio en las Tres Joyas es cambiar la dirección de vida y ultiliza un esfuerzo para encarnar al Buda, el Dharma y el Sangha.
Tomar refugio en el Buda es confiar en la manantial de entender, fe y compasión, simbolizados como Amida, el Buda de la Vida y Luz Inmensurables y su manifestación histórica, Buda Shakyamuni. Uno ve al Buda histórico como nuestro gran maestro y la encarnación de nuestro potencial humano verdadero. Al final, el Buda es nuestra naturaleza verdadera o vida universal. Por lo tanto, cuando tomamos refugio en el Buda, realmente tomamos refugio en nosotros mismos.
Tomar refugio en el Dharma es confiar en la realidad tal y como es, el cual se llama el océano de shunyata, las enseñanzas del Buda y la senda de entender, fe y compasión.
Tomar refugio en el Sangha es confiar en la comunidad practicante del camino budista que se esfuerza a manifestar y encarnar el reino iluminado aquí en la Tierra.
La Ceremonia de la Afirmación es el primer paso para hacerse un discípulo de Buda. Así, usted comienza el proceso que se transformará. Gradualmente, con el apoyo del Otro Poder, realizará profundamente de que cada uno de nosotros es la preocupación preferente de esta Gran Compasión. Como Shinran Shonin dijo, “Somos como los escombros que se transfigurarán en el oro.”
Votos del Bodhisattva
Los votos del Bodhisattva son la esencia del budismo Mahayana (vehículo universal). Son las antorchas que encienden nuestro camino espiritual. Estos votos son como un gran barco que nos lleva a la Otra Orilla, a la Tierra Pura, y son la inspiración dirigiéndonos en esta vida con el gran corazón de la compasión y del amor. Un Bodhisatttva es un ser dedicado a su cultivación espiritual mientras que trabaje incesantemente para el bienestar y la liberación espiritual de todos los seres.
Tomando refugio en Votos del Bodhisattva, nos dan vidas llenas de espiritualidad intensa. Permiten que incorporemos nuestras aspiraciones religiosas más altas, en las cuales nos confiamos al comprensión y amor más profundo ynos dedicamos al bienstar del nuestro mundo. Tienen energía para transformarnos en guerreros espirituales apacibles con la armadura valerosa de paciencia, de la perseverencia y de la atención concentrada; Asimismo, tendremos flechas de la generosidad, de la sabiduría y de la compasión.
Estos votos son una promesa viva que tenemos que reafirmar diariamente, no sólo una vez en un curso de la vida. Por lo tanto, debemos esforzarnos a recitarlos regularmente y practicarlos para siempre.
Cuatro Votos del Bodhisattva
Los seres vivientes son innumerables, prometo liberarlos
Los sufimientos son inagotables, prometo eliminarlos
Los dharmas son ilimitados, prometo dominarlos
El camino de Buda es insuperable, prometo encarnarlo.
Tomar los Diez Preceptos
Los Diez Preceptos tienen la capacidad de proteger la vida y hacer nuestras vidas hermosas. No son reglas o mandamientos de un deidad sino son pautas para tener una vida sana y ética y atestiguan nuestra dovoción para vivir una vida despertada. Con la gracia compasiva de Amida en nuestras vidas, nos autorizamos para mejorar su práctica y además nos animamos a mover hacia la paz, la alegría y el despertar. Asimismo, son las bases para la felicidad del individuo, la familia y la sociedad. Estos Preceptos nos ayudan a evitar los errores que crean más sufrimiento, miedo y desesperación sino que traigan alegría, comprensión y paz en nuestro mundo sufridor.
Los Diez Preceptos
El Primer Precepto: Me comprometo a la práctica del amor; Me abstengo de matar a los seres vivos.
El Segundo Precepto: Me comprometo a la práctica de la generosidad; Me abstengo de robar.
El Tercer Precepto: Me comprometo a la práctica de la responsiblilidad sexual; Me abstengo de la mala conducta sexual.
El Cuarto Precepto: Me comprometo a la práctica de la comunicación veraz. Me abstengo del habla falso.
El Quinto Precepto: Me comprometo a la práctica del habla amable; Me abstengo del habla escrabroso.
El Sexto Precepto: Me comprometo a la práctica del habla con sentido; Me abstengo del habla frívolo.
El Séptimo Precepto: Me comprometo a la práctica del habla armonioso; Me abstengo del habla difamatorio.
El Octavo Precepto: Me comprometo a la práctica de la tranquilidad; Me abstengo de la avaricia.
El Noveno Precepto: Me comprometo a la práctica de la compasión: Me abstengo del odio.
El Décimo Precepto: Me comprometo a la práctica de la sabiduría: Me abstengo de puntos de vistas egocéntricos.
Un Camino Para Todos
Estamos hablando de viajar en un camino espiritual y viviendo una nueva vida maravillosa. Por más 2.500 años, el budismo ha sido una camino probado por millones de personas. En la actualidad, es tu decisión para comenzar a una nueva vida, viajaando hacia el despertar. Usted debe entender que esto es totalmente posible; no hay razón porque usted no puede viajar en este camino de amor y de sabiduría. Ésta es la belleza de las enseñanzas Shin: está totalmente disponible para todo el mundo si somos santos o pecadores, ignorantes o sabios, blancos o negros, ricos o pobres, hombres o mujeres, ancianos o jóvenes. Recuerde que la Gran Compasión siempre se quede dentro de nosotros.